Me gusta de vez en cuando ver mis viejas fotos de cortes. Lo siento demasiado ajeno, es como descubrir algo nuevo.
Este fue mi primer corte for real (https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEho00QMMuO-K0ktVkgbhfljflEJFCEtZbi8rpyCNQyceyx3qvpTR1fsUsJotSb4rRf0FmjcRU-WmpxaWHLcUz-ryvggK1MCVcDh0bkwEd-gGHJPa7IOoAWWYH7BLgilxYNndIh9H9dLV00/s1600/nuu.jpg), lo hice con un fierro (al cortarse con alicate, tienen esas puntas...). Tiene una forma curiosa, me gustaba. Jamás lo oculté de nadie.
Estaba en el último día de clases de octavo básico, no recuerdo bien si encontré el fierro en el pasto, o en una sala. La cosa, es que ya me estaba creyendo el cuento de niña emo; derrepente me mandaba a cambiar odiando a todo el mundo, que tierna. Cómo era el último día, ya nadie estaba yendo efectivamente a clases, asi que las salas estaban desocupadas. Me encerré en una sala, y comencé a experimentar con el fierro. Hasta entonces, sólo me había hecho rasguños con metales, o me irritaba la piel con lápices. Cuando comencé a presionar el fierro contra la piel, y empecé a moverlo... descubrí el sonido de la piel a rajarse. Es hermoso. Salió algo de sangre, fue mi primer corte.
Aww, historia emotiva.
tambien me gusta verlos :)
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