In Nowhereland.

Love is louder than self-harm.

viernes, 30 de agosto de 2019

I can't keep doing this.

I'm being overdramatic (because I'm clearly drunk), but I can't stop crying, and I've got a razor in my hand. But also my house is a mess, lots of dirty dishes and stuff. Should I cut and sleep? Do the dishes and sleep? Cut, dishes and sleep? Or just sleep? Or keep drinking?

The thing is, since I live all alone, I can do any of the above. Tengo el poder de ser responsable y funcional, o mandarme una cagaa. Y en realidad a nadie le importa, y nadie tiene porqué saber. Si no tuviera un sentido de responsabilidad tan estúpidamente predominante, sería peligroso estar viviendo sola. 

Ugh.

I'm already drunk, but my despair is greater than any narcotic.

Ya estoy sola, pero necesito seguir tomando porque estoy chata. Estoy llorando de frustración, siento que lo único bueno que logré en mi pega me lo arrebataron y mi trabajo ahora es menospreciado. La cosa es, ¿Porqué todavía no me mando a cambiar? Creo que para variar la respuesta es miedo.

No me va a costar encontrar otra pega, y más encima con un mejor sueldo. Tengo colchón para estar al menos un par de meses sin trabajo, asique si no encuentro altiro tampoco es un problema. No existe un miedo lógico real.

Tengo miedo porque no sé cómo afrontar la situación. No sé cómo llegar y decirle a este gerente que no conozco, que me quiero ir porque todo se fue a la mierda y ya no quiero formar parte de esto. No sé cómo hacer que me echen, y me da culpabilidad renunciar.

Este es mi primer lugar de trabajo real (todo lo anterior ha sido freelance o startup). Entré a trabajar aquí hace dos años y medio, y desde entonces he hecho un arduo trabajo para hacer respetar mi puesto. Logré que me necesitaran tiempo completo, exigí un aumento de sueldo, estuve involucrada en todas las etapas de cada proyecto, asistiendo a reuniones y tratando directamente con los clientes, que son empresas bastante improtantes. Y eso lo logré sola, yo represento todo el equipo.

Ok, no estoy sola sola. Existe un equipo, y es el mejor equipo. Los cabros de desarrollo y arquitectura es uno de los grandes valores que me ha dado la empresa, es un súper buen ambiente. O en realidad lo era. Desde que despidieron al gerente general que todo se fue a la mierda. Hoy hubieron más despidos, y ya nadie tiene fe en nada. 

Voy a trabajar todos los días a hacer nada. Prácticamente nada. Con lo que queda de mi equipo directo, que es mi mejor amigo y aparentemente jefe, estamos intentando armar una documentación de los procesos y requerimientos a cumplir en cada etapa, cosa de que cuando lo despidan (que va a pasar pronto, y en verdad no quiero) digamos como: esto es lo que estaba estipulado, y este culiao nuevo no lo siguió, y por eso nos fuimos a la mierda.

Ahora estoy dudosa se renunciar, pero la verdad es que si él se va, yo renuncio. Lo digo con mucha más convicción que con la que estoy pensando en renunciar hoy. Estaría mucho más sola, sin nadie que me ayude a enfrentar está frustración en relación a toda la mierda que está pasando.

Es cosa de tiempo... 

miércoles, 28 de agosto de 2019

Miedo.

Los últimos meses he estado escribiendo en cualquier otro lado menos aquí. En libretas u hojas sueltas, pero principalmente en un Instagram que creé el año pasado por alguna razón. Al comienzo el contenido eran mensajes ambiguos pseudo profundos con imágenes darks y muchos hashtags. Pero de a poco se fue transformando en lo que es básicamente este blog. Creí que el formato iba a ser más cómodo, y lo es, solo que me siento limitada a la extensión de lo que escribo. Siento que tiene que tener un punto súper específico, y me estresa igual el hecho de tener que adjuntar una foto. Además, quiero tener toda mi historia en un sólo lugar, no repartidas en pedazos de internet. So, intento volver a mi blog. Hace tiempo que ya me da igual que alguien lea esto. Siempre he corrido el riesgo de que la persona sobre la cual escriba lo lea, asique da igual.

Hoy tuve un pésimo día, y luego de botar toda la carga emocional que venía arrastrando no me quedaron energías para cumplir con mis obligaciones, así que me senté y por alguna razón me puse a revisar estas páginas.

Es casi divertido como todo en mi vida se vuelve a repetir. Hay cosas que escribí el 2012, y aplican perfectamente a lo que me pasa hoy. Estoy más grande, aparentemente más funcional, pero emocionalmente no he cambiado nada. Desde el 2012 que tengo rechazo y terror de necesitar o querer a alguien, y a no querer estar sola. También destaco el contenido de mi periodo ultra aromático; he estado siempre convencina de que algo se rompió en mí y perdí la capacidad de tomarle el peso a sentimientos.

Igual me reí, entre mis quotes destacadas:
  • "Like dude, you're a fucking asshole, I just wanted your dick and it didn't even worth it"
  • "I've seen more guys crying que los que me han visto llorar a mi."
  • "La última vez que dije "te amo" era mentira. Fue porque estaba muy ebria, teniendo sexo. I'm done with that shit."
Fue un periodo de mierda (como estaba recordando en conjunto con amigos el otro día, aportando su punto de vista de mis distintos ámbitos sociales). Mucho hueveo, y mucha depresión. No me podía importar menos los sentimientos del hueón de turno, mi mayor preocupación era no querer suicidarme. 

And here's the thing, no sé qué pasó, pero un día me puse a pololear. Ahora que lo veo en retrospectiva, no es porque yo quisiera, porque en verdad tuviera sentimientos. Fue porque me aburrí, y esto parecía un ambiente seguro, y cedí. Sí, creo que el concepto aquí es "cedí". El primer acercamiento fue por curiosidad. Estaba este hueón que me perseguía, y yo con mi forma de razonar en ese entonces pensé "me lo voy a comer para cachar qué hueá". Él se pasó rollos, y yo como "Calmao, no significó nada". Y así partió una muy extraña relación de 5 años. Cabe destacar que a los 5 meses me desesperé, sentía que todo fue un mal entendido, que yo no estoy para ese tipo de relaciones, y básicamente huí. Y por presión, volvimos. Y terminamos porque como pareja era insostenible, pero volvimos de nuevo por costumbre.  Hasta que ya ni la costumbre era cómoda.

Mi punto aquí es: yo no lo escogí, solamente cedí. Y es algo que siempre me ha pasado. Por eso creo que estaba tan muerta por dentro. Cómo puedo esperar sentir algo, sí al final es como "ok, en verdad no me gusta, pero está ahí". Porque siempre hay alguien que no me interesa, ahí. Y me aburrí de eso. 

Eso me lleva a mi situación actual: caos. Llevo semanas internamente corriendo en círculos porque no sé cómo contener lo que me pasa. Es tanto así, que necesité plantearlo en psicoterapia para descifrarlo. Según entendí es algo así: Estuve tanto tiempo sin sentir nada, que estoy abrumada con este "destape emocional" (así lo llamó). Es algo nuevo y distinto, y yo le tengo terror a lo nuevo o distinto. También tiendo a racionalizar todo en mi vida, y tratando de pasar un checklist mental para verificar que todo esté bien, colapsé porque no calza con mis estándares de "normal". No logro procesar el hecho que estoy desarrollando sentimientos de forma simultánea a los suyos, y no después de un rato simplemente just cause I should. Y me cuesta aún más aceptar que me está pasando tan pronto, y tan rápido. Y trato de pausar, y me cuestiono el porqué de lo que siento, qué tiene él, porqué me pasan estas cosas con él, siendo además tan distinto al perfil al que estoy acostumbrada. Y no encontrarle lógica a nada hace que me desespere.

Debería estar disfrutando de esto, porque todo va muy bien, y todo es demasiado lindo. Pero no puedo evitar pensar en todo esto, todo mi historial y carga emocional. Me resisto a necesitarlo, a pensar que lo necesito. Es un tema recurrente respecto al que he escrito, pero no sé manejarlo. Queda todo en la teoría, porque yo sí necesito. 

Quoting myself, hace algunos años:
"Siempre he pensado que soy muy débil, y me esfuerzo por pretender que no lo soy. Pero que en el fondo necesito ayuda, necesito que me salven. Pero no. En realidad no. No necesito que me salven. ¿Cuál sería el punto? Volverme más débil, más inútil. No debo dejar que se apiaden de mí por lástima, que se sientan responsable de mi. Tengo que juntar fuerzas, levantarme, pelear. (...)
Quiero luchar contra mis propios demonios, pero con alguien a mi lado. No para que luche por mi, si no para ayudarme a levantarme si caigo, para poder seguir luchando. Y no solo eso. Quiero estar ahí también para él como refuerzo, ayudarlo también a levantarse cuando sea necesario. 
Eso significa ser pareja. Es ese tipo de compromiso, ese tipo de involucramiento. No es necesariamente compartir todos los intereses, ya que juntos podemos descubrir nuevas cosas. No es conocer completamente al otro, ya que es bien sabido que uno nunca termina de conocer a alguien, siempre hay nuevas sorpresas y eso es lo interesante. No es solo compartir momentos y pasarlo bien, o que sea una relación apasionada. 
Es una mezcla de todo eso. Es estar ahí para el otro, pero seguir creciendo como persona. Ser incondicional, confiar en el otro, no depender. Poder entender, comprender al otro, sin juzgar, sin intentar cambiarlo. Es luchar lado a lado."

Suena todo muy coherente y bonito, pero aquí estoy. Corriendo en círculos, sin saber qué hacer con todos estos sentimientos, tratando de construir muros que se derrumban solos. Muerta de miedo por sentirme expuesta. Aterrada por querer, por extrañar, por necesitar, por desear. 

Y todo esto llegó justo cuando toda mi vida está en crisis; me mudé y estoy tratando de aprender a vivir por mi cuenta, y tratando también de cambiarme de trabajo, y sufrido perdidas. Todo mi entorno está cambiando, y ahora yo estoy cambiando. Supongo que es bueno, pero tengo miedo y no quiero hacerlo sola.